Encuentra Autolavado Coches en Alicante

Nuestro precio medio oscila entre los 28 euros para una limpieza básica de mantenimiento exterior e interior hasta los 1200 euros aproximadamente para servicios más avanzados propios del Detailing. Nosotros no diferenciamos tamaños dentro de la categoría de turismos, pues la experiencia el cariño y trabajo dedicado es el mismo en un vehículo grande que en uno pequeño. Además, tenemos un servicio innovador y exclusivo en España, de momento solo en Alicante, y que consiste en una tarifa plana donde pagas desde 35 euros al mes y puedes traer el vehículo las veces que quieras y cuando quieras (de forma ilimitada) a limpiar el coche tanto por dentro como por fuera. Increíble, ¿no? No cobramos propina, aunque siempre hay alguien que nos invita a un café. ¡En este sector donde se unen pasiones, se hacen amigos con muchos clientes!

Sobre productos, hay un gran mercado de marcas extendidas por todo el planeta, en el que puedes encontrar muchísimas variaciones, como el compuesto químico, la forma de aplicar o la densidad del mismo, entre muchos otros. Para el pulido de vehículos, usamos productos de pulimentos para distintas etapas. Es decir, no es lo mismo pulir un coche muy rayado y que presenta micro arañazos por toda la carrocería, que un vehículo que ha sufrido un raspón o una transferencia de pintura de algún objeto exterior, por ejemplo. Por eso, podemos encontrar varios tipos de compuesto de pulimento que se aplican en función del estado del vehículo. La principal ventaja que tiene este tipo de pulimentos, es que somos capaces de, mediante la máquina correcta y la técnica bien aplicada, eliminar rayas semi- superficiales, eliminar la opacidad que presentan muchos coches y devolver el brillo y el efecto espejo del primer día.

Sobre las manchas de tapicería, la experiencia nos dice que el método más efectivo es repetir el proceso tantas veces como sea necesario hasta eliminarla. Evidentemente, existen productos específicos para automoción y solo éstos deben ser usados para las superficies de los materiales que están hechos los coches. Tenemos que evitar esas “recomendaciones” que suelen aparecer en algunos medios y formas caseras de limpiar los coches. Un coche está hecho de un material determinado y, por tanto, los productos de cuidado de automóvil están testeados científicamente para que cumplan su cometido y tengan un resultado efectivo. Evidentemente, cuando además tienes máquinas o herramientas profesionales para la limpieza de éstos, el tiempo invertido se reduce drásticamente y el resultado suele ser más efectivo.

El proceso para aplicar un tratamiento cerámico es largo y delicado. Podemos decir que este tipo de acabado o sellado es el más completo de todos los que hay en un proceso de Detallado o Detailing. Para empezar, el vehículo pasa por una serie de procesos de pre-lavado y lavado con jabones específicos. Además, se realiza siempre un descontaminado completo para liberar el poro de la carrocería y asegurar que las chapas están lo más vírgenes posibles a efectos de limpieza. El objetivo es tener una chapa bien limpia y con una base perfecta para el siguiente paso, que será pulir. El proceso de pulido, incluso teniendo el coche en las mejores condiciones físicas, siempre se realiza. Si pusiéramos un microscopio en una carrocería de un coche recién salido de fábrica, seguramente veríamos algunas imperfecciones y desvariaciones. Esto nos indica que tenemos margen de mejora y que podemos adecentar más la carrocería. Una, cuanto más plana es, más efecto rebote va a tener el sol o las luces al reflejar en la carrocería y, por tanto, mejor aspecto, brillo y efecto espejo tendrá. De ahí la importancia de pulir el coche a su máximo exponente. Además, dejamos una superficie lista y preparada para trabajar el último paso, que será el tratamiento cerámico. Los tratamientos cerámicos están basados en silicio de cuarzo, entre otros. Esto lo podemos encontrar en la famosa escala de Mohs, donde nos enseñan las durezas de la tierra, siendo el diamante la piedra más dura. Los tratamientos cerámicos para automoción están mezclados con otro tipo de químicos y disolventes para conseguir una textura líquida y tener unos tiempos de secado correctos. Para la aplicación del mismo, y teniendo en cuenta que la carrocería tiene la mejor versión de sí misma, deberemos de aplicarlo en fracciones de 50x50 con un aplicador especial, siempre de forma rectilíneo, y dejando actuar algunos segundos, para luego retirar con una microfibra específica para el caso. Así con todo el vehículo de forma minuciosa, pasando también por plásticos, parrillas, faros. También existen estos tratamientos para el interior del coche, como textil, cueros o plásticos de interior. Una vez terminada la aplicación, podríamos volver a aplicar una segunda o tercera capa para garantizar su durabilidad, que puede oscilar entre 2 y 5 años dependiendo del tipo de dureza que hayamos escogido. Así pues, hemos conseguido un vehículo que brilla más que antes, un efecto espejo que envidia aquel que lo mira y una protección que protege contra contaminantes exteriores, mosquitos, lluvia ácida, entre otros, con un gran efecto hidrofóbico que resulta hasta curioso ver como el agua repele y resbala por la carrocería.