Albert Poch Tort (28 años, natural de Orís, Osona-Barcelona) y Andoni de la Llosa (40 años, natural de Bilbao) son ambos abogados especializados en litigación civil y mercantil y, sobre todo, en reclamaciones de daños derivadas de infracciones del derecho de la competencia, como cárteles. Coincidieron trabajando en uno de los principales despachos de abogados de España, Pérez-Llorca, donde surgió la idea de crear un despacho de abogados diferente: Redi. Redi es un despacho de abogados, con vocación internacional, especializado en grandes litigios y en reclamaciones de daños derivados de infracciones del derecho de la competencia que huye del concepto tradicional de despacho corporativo. Nos explican que la práctica totalidad de empresas que operan en nuestro país han sido directamente perjudicadas en algún momento de su vida por algún tipo de práctica anticompetitiva cuyos efectos ignoran pese a la evidencia de una resolución sancionadora de una autoridad de competencia.
Redi se configura como el primer despacho nacional orientado a los perjudicados por dichas actuaciones y propone soluciones creativas para activar las reclamaciones y lograr que éstas se traduzcan en una compensación económica que repare el daño causado. Los profesionales de Redi cuentan con una alta especialización adquirida en los despachos más prestigiosos a nivel nacional e internacional, el más alto grado de implicación con sus clientes y una profunda convicción de que su labor tiene un efecto positivo en la economía. Albert y Andoni eligieron dejar su posición de abogados en un gran despacho de abogados, donde les encantaba trabajar, porque se ilusionaron con la idea de crear algo realmente innovador en el sector legal. A ello se le unía la profunda convicción de que desde su modesta posición, pero gracias a la amplia especialización en los despachos de abogados más prestigiosos de España, pueden ayudar a cientos de familias y empresas a recuperar un dinero que no saben que les han quitado.
¿Cuál es el coste medio de una consulta legal con vuestros abogados? ¿De qué factores depende esto?
Nuestro despacho es diferente. No llevamos centenares de asuntos, sino que trabajamos en pocos y muy concretos proyectos con una profundidad, eso sí, mucho mayor. De ahí que el coste de nuestros servicios varíe mucho en función del tema del que se trate y que no tengamos una “tarifa estándar” por el mero hecho de que no hacemos “asuntos estándar”.
No obstante, en Redi tratamos de obtener fórmulas que permitan financiar las reclamaciones que proponemos interponer, de tal manera que en ocasiones acudimos a un cliente, le informamos de que tiene un daño a reclamar que desconocía e incluso le habilitamos la posibilidad de interponer esa reclamación sin que él tenga que pagar ni un euro por anticipado.
¿Por qué creéis que resulta importante contar con un bufete de abogados de amplia experiencia trayectoria en el campo?
Creemos que la “amplia experiencia” está sobrevalorada y es un dogma que, en ocasiones, no aporta valor real al cliente. Lo que sí creemos que es importante a la hora de prestar un servicio de asesoría legal o de defensa jurídica de los intereses y derechos del cliente es el trabajo dedicado y la exhaustividad con la que se ha estudiado un asunto en concreto.
Eso sí aporta valor al cliente, porque, cuando hablas con él por primera vez, ya conoces perfectamente no sólo la viabilidad jurídica y económica de su reclamación, sino también su sector y el contexto del mercado concreto en el que opera. Con todo, es evidente que las reclamaciones en las que nosotros asesoramos son tremendamente complejas y tienen muchas particularidades que hacen necesario que el cliente cuente con un especialista en esta materia si quiere que su reclamación tenga viabilidad.
¿Cuál es la visión del servicio que brindáis? ¿Cuál creeis es la clave para que sea exitosa?
Nuestra visión pasa, como hemos indicado, por el estudio exhaustivo de un ámbito legal y jurídico tan concreto como el que hemos explicado. Lo único que tenemos nosotros es confianza en nuestro modelo, basado en la “ultra-especialización”, el trabajo exhaustivo y anticipatorio y en la convicción con la que afrontamos nuestros asuntos.
Dado que siempre llevamos a los perjudicados por una conducta anticompetitiva (nunca a los infractores), sólo trabajamos en casos en los que estamos convencidos de que nuestros clientes tienen la razón.