Bàrbara Vanrell, nacida en Palma de Mallorca, es farmacéutica, dietista-nutricionista, Máster en Nutrición y Metabolismo y Postgrado en Nutrición y dietética aplicada a la actividad física y deportiva. También es antropometrista ISAK nivel I. En la licenciatura de Farmacia conoció unas bases de la nutrición y bromatología que despertaron su interés para seguir formándose en esta materia.
Por ello cursó un Máster en Nutrición y metabolismo en la Universidad de Barcelona y al cabo de unos años se graduó en Nutrición Humana y Dietética en la UCAM. Su interés constante por seguir formándose y especializarse en nutrición deportiva le llevó a cursar el Postgrado en Nutrición y dietética aplicada a la actividad física y deportiva y se acreditó como antropometrista nivel I de ISAK. Actualmente sigue en continua formación para ofrecer un servicio basado en las últimas evidencias científicas.
Después de varios años compaginando la profesión de farmacéutica comunitaria y de dietista-nutricionista, hace 3 años Bàrbara decidió montar su propia consulta de Nutrición. Actualmente trabaja en solitario, pero no descarta en un futuro formar un equipo para poder ofrecer otras áreas de especialización de nutrición.
Su área de especialización es la nutrición clínica para adultos: tratamiento nutricional de patologías como el sobrepeso, la obesidad, las dislipemias, la hipertensión, la diabetes, las alergias e intolerancias alimentarias, los problemas digestivos… Asimismo está especializada en nutrición para embarazo y lactancia, nutrición deportiva para adolescentes y adultos: planes nutricionales adaptados a la modalidad deportiva y periodo de la temporada.
En la actualidad no combino ambas profesiones sino que me centro en la consulta de nutrición. No obstante, todos los conocimientos como farmacéutica son de utilidad en el día a día.
Lo más importante es el trato con el paciente: empatizar con ellos, motivarlos y acompañarlos a realizar el cambio que ellos desean. Esto no debe faltar nunca en las consultas.
Las bases de una alimentación saludable serían comer comida sin procesar o lo menos procesada posible. En nuestro entorno usamos de modelo la dieta mediterránea, la cual prioriza el consumo de alimentos de origen vegetal, como frutas, verduras, cereales integrales, legumbres, frutos secos… Desplaza el consumo de carnes y embutidos dando más preferencia a los pescados y huevos. Y con un consumo ocasional de alimentos procesados. Como bebida, agua.
Cuando se restringen grupos importantes de alimentos es posible que puedan aparecer carencias nutricionales. Va a depender del grupo alimentario que se restrinja y de si existen alternativas que los sustituyan.
Que se formen continuamente, que no piensen nunca que lo saben todo. Que empiecen poco a poco sin frustrarse porque los inicios son difíciles. Que aprendan de compañeros y que tengan paciencia, al final se llega donde uno quiere.
A día de hoy, existe más información acerca de la ciencia de la nutrición de la que ha habido jamás. Pero la abundancia de información también puede ser peligrosa si se carece del criterio adecuado para seleccionarla y obtener de ella el conocimiento necesario. Para ello, los profesionales de la nutrición como Bàrbara Vanrell saben cómo poner a sus pacientes en el camino adecuado para que empiecen a conocer mejor los hábitos nutricionales necesarios para mejorar su salud.