Alejandro Jordá Langfeldt, español de 57 años de padre mallorquín y de madre noruega, está casado, es licenciado en psicología, tiene un posgrado en gestión de empresas y cuenta entre sus aficiones la música clásica, tocar el piano, la ciencia, el arte, la historia y la política. Considera un reto intelectual el hecho de trabajar con idiomas, y un acicate la libertad de trabajar para uno mismo y contribuir a mejorar la sociedad mediante una labor bien hecha. Además, es una amante de los idiomas y del lenguaje y opina que deben respetarse y utilizarse como es debido.
Su empresa de traducción comenzó en 1987, cuando su madre se asoció con unos amigos noruegos dedicados a este negocio en su país de origen. Cuando estos socios se jubilaron, la familia de Alejandro adquirió su participación. Se trata, por tanto, de una empresa familiar que apuesta por el trabajo bien coordinado de un equipo formado por profesionales de muy alta cualificación para proveer a los clientes un servicio de la máxima calidad.
Se dedican de manera exclusiva a la traducción, si bien en esta abarcan muchas temáticas: tecnología, economía, medicina, derecho, marketing, publicidad, arte, religión, etc. Esto se debe a que su cartera de clientes es muy heterogénea, lo que les lleva a contar con profesionales especialistas en cada materia para garantizar el registro adecuado a cada tema y el rigor imprescindible que garantice la máxima calidad de la traducción.
A través de una exhaustiva búsqueda, a lo largo de los años, de traductores de primera fila. También, lógicamente, se debe a que existe una demanda de estos idiomas.
Utilizamos los tratamientos de textos más habituales, ya que es como los clientes nos lo demandan. También disponemos de memorias y otros recursos informáticos que nos son de mucha ayuda. Pero esta actividad es fundamentalmente “artesanal”, tiene mucho de ciencia y de arte.
Uno de los atractivos de este negocio es la enorme diversidad de temas que abordamos. Podemos estar traduciendo al mismo tiempo una sentencia judicial, una carta de un restaurante, las especificaciones técnicas de un edificio, una escritura de constitución de una sociedad, un historial médico, un texto publicitario, la descripción de un yacimiento arqueológico. La lista es interminable y enormemente variopinta.
Nuestros clientes se caracterizan por poseer un nivel cultural o profesional muy elevado, lo cual hace que sean muy exigentes, saben lo importante que es contar con una buena traducción; pero al mismo tiempo son muy agradecidos y fieles cuando se les ofrece un producto y un servicio de calidad. Por ello es imprescindible contar un equipo de traductores y correctores muy cualificados, especializados y con gran experiencia.
También es muy importante disponer de una buena organización y un sistema de trabajo eficiente, en donde la revisión de las traducciones es un elemento fundamental. Todas nuestras traducciones se someten siempre a un exhaustivo y minucioso proceso de repaso y revisión. También huelga decir que los traductores siempre traducen a su lengua materna.
Langfeldt Translations cuenta con 32 años de trayectoria en el sector de las traducciones. Su método de trabajo garantiza a sus clientes un excelente nivel en la traducción de textos de cualquier temática. En Langfeldt Translations todos los profesionales traducen a su lengua materna y todas los encargos son minuciosamente revisados. Además, los profesionales son escogidos por su competencia y su especialidad en los temas de los textos a traducir. Mediante el proceso exhaustivo de traducción y revisión, Langfeldt Translations ha logrado su reconocimiento en el sector y la confianza de una amplia cartera de clientes de alto nivel que demandan la máxima calidad.