Beatriz González Gómez nació en Ourense y primero vivió en Madrid hasta los 5 años, luego en Vigo hasta los 24 y después se mudó a Francia (primero a París durante 5 años y luego a Béziers, en el sur, durante 3 años más). Finalmente retornó a Galicia y vive en Vigo desde hace 4 años, tiempo durante el que abrió un centro de fisioterapia junto a su pareja Francis.
Tras haber trabajado tanto en centros públicos franceses como en centros privados de Francia y España, Beatriz se decidió por este proyecto para ofrecer al público todos sus conocimientos y su manera de trabajar, a su ritmo y su gusto, siendo capaz de organizarse y volviéndose su propia jefa.
En su consulta, Beatriz trabaja en equipo junto con su compañero, socio y pareja. Ambos intentan dar un toque muy personal a su trabajo, realizándolo desde la cercanía, la escucha activa y el respeto al paciente. Disfrutan trabajando con calma, dedicando el tiempo que cada uno merece, por lo que sus sesiones duran una hora.
Ambos comparten una visión holística de la salud, por lo que intentan aunar no sólo la terapia manual, sino otras estrategias que puedan ayudar a la mejoría de los síntomas. El cuerpo es un todo (cuerpo físico, mente y alma) y así es como lo vemos.
En Adiante Centro de Fisioterapia están especializados en terapia manual y en todas aquellas disciplinas propias de un fisioterapeuta. Además, Beatriz es terapeuta en psiconeuroinmunología, que es un tipo de medicina evolutiva, que engloba el entorno, el estado anímico, el ejercicio, la alimentación y el biorritmo como herramientas para mejorar un determinado problema de salud.
Nos gusta observar al paciente como un todo, no sólo como una persona que acude puntualmente por un problema o síntoma concreto. Todos tenemos un pasado a nuestras espaldas y el cuerpo tiene memoria.
Todos tenemos también una forma de ser que determina el cómo nos enfrentamos a los diferentes obstáculos que nos encontramos en la vida. Tienes que conocer la historia de la persona que tienes enfrente, conocerla poco a poco para saber cuál es la mejor manera de ayudarla. No todas las técnicas de tratamiento funcionan para todos de la misma manera.
La valoración inicial es clave. Si no tienes claro cuál es el objetivo del paciente que tienes enfrente y cuál es su situación actual (nivel de trabajo, estado anímico y físico, necesidades vitales…) entonces no podrás ayudarle como se merece.
Precisamente, la prevención es quizás el sector que más me interesa en estos momentos. Creo que llegamos a las cosas demasiado tarde y que muchas enfermedades o lesiones se podrían prevenir si se invirtiese más en prevención a través de los distintos profesionales de la salud, los gobiernos, las campañas publicitarias y de redes sociales…
Uno de nuestros puntos fuertes en el trabajo en nuestro centro es precisamente la prevención. Por ello invertimos gran parte de nuestro tiempo en hacer educación para la salud a través de explicaciones individuales, consejos de ejercicios para evitar recidivas, normas de higiene postural… Recientemente hemos comenzado a ofertar clases de ejercicio terapéutico en nuestro centro precisamente para fomentar el fortalecimiento y el ejercicio y prevenir lesiones y patologías.
En primer lugar debemos acudir a aquel profesional que esté formado para ayudarnos. Si tenemos un problema muy común como un dolor de espalda o en alguna articulación, cualquier centro de fisioterapia que trabaje adecuadamente podrá ayudarnos, pero si buscamos algo muy concreto como un tratamiento para un problema mandibular o un problema neurológico, entonces aconsejo acudir a profesionales que estén formados específicamente en este campo. De esta forma, al menos nos aseguramos de que estamos frente a un profesional al que no le resulta ajeno nuestro problema y que tendrá experiencia en este campo.
Antes de someternos a una sesión de fisioterapia por primera vez en un centro, deberíamos primero rellenar un consentimiento informado y firmar la ley de protección de datos (ambas cosas son obligatorias a día de hoy); y, en segundo lugar, lo lógico y más adecuado sería que el fisioterapeuta nos sometiese a una pequeña entrevista donde se vean los antecedentes en cuanto a enfermedades, lesiones o problemas de salud, nuestro nivel de sedentarismo, la medicación que tomamos…
En fin, una historia clínica breve (con los puntos más importantes) previa al tratamiento. A continuación el fisioterapeuta realiza una valoración del problema por el que el paciente ha acudido a consulta (a través de test, de manipulaciones, observando, etc) y, por último, se aplica el tratamiento.
Dice el refranero español que “prevenir es curar”. Y eso mismo piensan los fundadores del centro de fisioterapia Adiante en Vigo. Por eso hacen hincapié en la fisioterapia preventiva como fuente de salud presente y futura, que ayuda a evitar la aparición de problemas que siempre serán más difíciles de tratar y más dolorosos de soportar cuanto más tiempo se hayan desarrollado. Asimismo, también ejercen la fisioterapia recuperadora desde un punto de vista holístico, aceptando el cuerpo humano como un todo interrelacionado que requiere un tratamiento integral.