Alfredo Hernández-Díaz Fernández de Heredia es un sevillano de 47 años y consultor de marketing digital en España y Latinoamérica, además de colaborador asiduo en revistas y web especializadas, profesor y autor de marketing digital para varias instituciones universitarias y escuelas de negocio. Alfredo desempeñó su carrera laboral previa en numerosos sectores, como el editorial, la energía, el I+D, las inversiones y otros, pero siempre le atrajo el mundo de la informática desde que tuvo su primer ordenador (un Spectrum 48 k) siendo niño. Más tarde, estudiando a mediados de los 80 en Estados Unidos, tuvo su primer contacto con internet. Además, siempre le interesó dirigir su propio proyecto, por lo que hace más de 11 años, durante el inicio de la crisis económica, decidió fundar su propia empresa y dirigir sus pasos al mundo online. Su motivación principal era y sigue siendo dirigir sus propios proyectos para administrar sus conocimientos, tiempo y recursos.
Tras un extenso periodo de formación y tres duros años iniciales, su empresa logró estabilizarse y no ha dejado de crecer en clientes y ventas desde su fundación en el segundo semestre de 2008. A partir del 2011, la mayoría de clientes venían por referencias y pudo cambiar su modelo de negocio a proyectos de más larga duración, ofreciendo una cartera de servicios mensuales y generando una relación de confianza con los clientes, cuidando su fidelidad y permanencia.
Las áreas que más demandan sus clientes (PYMES de servicios y comercio electrónico, principalmente) son el posicionamiento SEO y SEM, la analítica web, la formación in-company y la coordinación de proyectos de marketing digital para crecer o dar a conocer sus negocios en internet. Explica Alfredo que hoy en día crece la demanda sobre el uso del big data marketing para analizar datos difíciles de medir (emails, fotos, comentarios en redes sociales, búsquedas en internet, etc., que son generados a través de distintos dispositivos conectados a internet) para mejorar la rentabilidad del negocio y la satisfacción del clientes.
Poder ayudar a otros profesionales o empresas a cumplir sus objetivos en internet. A medida que conoces en profundidad al cliente, asesorando y poniendo en marcha estrategias, se genera una relación de confianza. Un ejemplo de una relación duradera con clientes es que suelo ir a congresos de marketing digital o e-commerce con algunos de ellos para apoyarles en lo que necesiten.
Nos distinguimos por la implicación, dedicación y pasión en lo que hacemos, lo que posibilita un servicio a medida y de calidad. La base por la que comunicamos nuestra pasión por el trabajo a nuestros clientes está en tres aspectos esenciales. En primer lugar, el extraordinario capital humano que me rodea y del cual aprendo día a día. En segundo lugar, la elevada profesionalidad hacia el proyecto y hacia el cliente y, por último, el trato cercano y de confianza. La cara de felicidad de un cliente con nuestro trabajo es la mejor satisfacción que se puede alcanzar como consultor.
Siempre que me preguntan, respondo que la mayor inversión son las ganas e ilusión a la hora de ofrecer cualquier tipo de servicio empresarial. Tres recursos son imprescindibles para poner en marcha un proyecto de estas características: un dispositivo con conexión a internet, una cabeza con ideas y networking. Además de un equipo humano capacitado y un plan con acciones, según el tipo de servicio, se requiere equipamiento técnico en dispositivos (hardware) y aplicaciones (software).
También es muy importante la creación y mantenimiento de nuestras redes de contactos, generando una relación cercana y de confianza. El networking va a facilitar un aumento de clientes, ventas y de oportunidades de negocio. Respecto a los servicios de marketing digital que ofrecemos, nos adaptamos a las necesidades del cliente, desde el uso de técnicas más convencionales hasta las más sofisticadas (marketing de automatización con inteligencia artificial, publicidad nativa y programática combinada, marketing de contexto, posicionamiento de búsquedas por voz, social e-commerce, entre otros).
No existe un modelo de marketing digital perfecto. Lo esencial de realizar un buen marketing es planificar, implementar y controlar estrategias de marketing adaptadas al negocio y al cumplimiento de objetivos concretos. Las empresas saben lo que es internet, poseen un sitio web, usan el correo electrónico, pero no desarrollan las estrategias adecuadas. Hay pequeñas y medianas empresas que no suelen desarrollar estrategias de posicionamiento, publicidad en internet, o no aprovechan bien las redes sociales.
A diario me encuentro con negocios que tienen redes sociales dadas de alta, o bien no generan ningún tipo de contenido de interés para los potenciales clientes o clientes, o bien si lo hacen, no tienen impacto porque su público objetivo simplemente no está en dicha plataforma social. Muchos no saben ni para qué las tienen. Se debe analizar cada caso particular. Los empresarios deben tener en cuenta que hay que pensar en el medio y largo plazo para ver la rentabilidad de las acciones que se llevan a cabo. Una vez que los propietarios de las empresas o directores comunican con nosotros, es necesario implicarles en el proceso, partiendo de una formación a los empleados para que sientan que forman parte activa de un proyecto nuevo.
Actualmente, nuestra presencia digital es muy amplia (redes sociales, redes profesionales, plataformas de geolocalización, directorios, plataformas LMS o de educación, sitios web, blogs, etc.). A través de cualquiera de estos canales, cualquier usuario o empresa interesada se puede poner en contacto con nosotros realizando una consulta o solicitando información sobre marketing digital a través de email, formulario, teléfono, videollamada, etc. Habría que distinguir entre usuarios/potenciales clientes y clientes.
Para los no clientes, según el tipo de petición, o bien respondemos a través de email o mensajería instantánea, siempre que sean peticiones genéricas que no requieren extraer una información profunda, o bien por teléfono o videollamada, en peticiones más específicas que requieren una recopilación de información más amplia. En el caso de clientes, lo más habitual es que nos escriban por email o nos llamen por teléfono. Según el tipo de consulta, derivamos con un especialista.
En la consultoría de marketing digital de Alfredo apuestan por establecer una relación de proximidad y confianza con el cliente para explicarle en qué consiste el plan de marketing que van a aplicar a su empresa y por qué es necesaria la implicación del empresario en la gestión de la visibilidad digital de su marca. En este sentido, Alfredo y su empresa apuestan no solo por ofrecer el mejor servicio a sus clientes, sino por hacerles conocedores de los motivos por los que se toman unas decisiones de marketing sobre otras y por qué es importante atender al espacio digital como un pilar fundamental en la proyección y el éxito de la empresa.