Luis Matos es un carpintero bilbaíno de 54 años que aprendió el oficio dentro de su propia familia con la tutela de su tío. Hoy en día preside una empresa de carpintería de madera en cooperativa con otros 4 socios, cuya denominación es CARPINTERÍA MALMASIN. Luis se sintió atraído por la carpintería desde niño debido a que su tío era un gran ebanista. Fue en su taller, siempre lleno de txirlora y con olor a madera, donde Luis se formó como carpintero.
Carpintería Malmasin surgió a partir de la ya extinguida carpintería ECHAVE que fue un gran referente para Bizkaia en los años 80. Superada la reciente crisis económica que afectó a todos los sectores productivos, la plantilla actual está formada por 15 trabajadores fijos de total confianza y grandes profesionales.
En Carpintería Malmasín realizan cualquier trabajo relacionado con la carpintería de madera y están especializados en carpintería de fachada, es decir, marcos de ventana, balcones y, sobre todo, en los miradores de madera típicos de la arquitectura del Casco Viejo de Bilbao. Es aquí donde ponen su sello diario, ya que participan en muchas de las obras de rehabilitación que se llevan a cabo en la capital vizcaína, tanto sustituyendo miradores como reparando los deteriorados.
Lo más importante para nosotros es conseguir siempre que el cliente se sienta satisfecho. Para ello no dudamos en desplegar nuestros conocimientos, producto de la experiencia que nos avala, y ponerlos a su disposición, ofreciendo asesoramiento técnico siempre que lo soliciten y adaptándonos a sus necesidades.
Realizamos inversiones en maquinaria y herramienta continuamente, con el fin de dar un servicio de calidad y precisión a nuestros clientes, ya que cada día el mercado se muestra más exigente y no queremos quedarnos fuera.
Trabajamos con diferentes fábricas de maquinaria, no nos centramos sólo en una de ellas, pero siempre adquirimos las marcas punteras del sector. Las herramientas deben de ser modernas, dado que la rapidez de elaboración y el acabado final del producto son fundamentales para lograr competir en la industria de la madera.
Nuestro trabajo comienza a partir de los diseños que realizan arquitectos y decoradores. No obstante, nos gusta participar del resultado final siempre que se pueda perfeccionar, ya que en ocasiones los diseños sobre papel no son técnicamente viables y es ahí donde colaboramos ayudando a reconducir los proyectos a fin de conseguir un producto fiable.
La madera es un elemento natural y vivo que transpira, que no puede compararse con otros materiales como el PVC o el aluminio, cuya vejez llega antes. Estos dos últimos son materiales que no transpiran. Como consecuencia, para conseguir una mayor estanqueidad se ha de trabajar con los puentes térmicos de sus perfiles, algo que no es necesario hacer con la madera, ya que el propio material actúa como tal.
En muchas ocasiones, se comenta el enorme mantenimiento que necesitan las ventanas de madera; sin embargo, actualmente existen materiales en el mercado que garantizan hasta diez años de conservación sin mantenimiento y sin necesidad de volver a barnizar o pintar. No cabe ninguna duda de que, si lo que se desea es un hogar confortable, la madera pone el toque.
La madera lleva siendo miles de años un material constructivo y de ornamentación de primera categoría. Es por eso que siempre tiene un toque clásico y distintivo en todos sus servicios de carpintería. Además, su mera presencia añade un elemento natural al espacio que engalana. La Carpintería Malmasin, dirigida por Luis Matos, un carpintero vocacional, aporta la profesionalidad de sus trabajos que le ha valido renombre en toda Bizkaia y que puede contemplarse en algunos de los rincones más entrañables de las calles del Casco Viejo de BIlbao.