Adrian Martinez es un gaditano de 37 años y que regenta la empresa Impresiónate Rotulación en la mencionada ciudad andaluza. Esta es una empresa Familiar que evolucionó y formó Bruno, el padre de Adrián, a partir de la tienda de fotografía que tenía desde hace años.
El patriarca ya está jubilado, pero ahora sus tres hijos han seguido con este negocio. Además de Adrián, están Ángela que lleva los asuntos de oficina y la gestión de la empresa y Alejandro que se encarga del diseño gráfico. Adrián estudió náuticas, realizó un curso privado de diseño gráfico y llegó a la profesión que ejerce ahora gracias a su padre, que siempre se ha dedicado a este oficio. El joven, cuando no estaba navegando, le echaba una mano en el negocio, hasta que en el año 2014 decidió que esta también sería su profesión y su método de ganarse la vida.
Puede que lo que quede, es el afán por ir creciendo día a día, intentando ofrecer siempre el mejor trato a nuestros clientes, haciendo lo que realmente nos gusta.
Marcas hemos utilizado muchas: mactac, 3m, avery, ritrama… la verdad es que más que marcas en concreto nos gusta usar el vinilo exacto para cada tipo de aplicación.
Ofrecemos rotulación en general, pero somos especialistas en rotulación de vehículos, y rótulos corpóreos, también hemos hecho vallas, lonas gigantes, en fin, todo lo que nos propongan intentamos darle salida.
La impresión textil varía mucho dependiendo del material a imprimir, color o uso que se le vaya a dar, la sublimación térmica da mucha calidad por lo que nos gusta mucho ofrecerla no solo en textil.
La firma protagonista de esta entrevista, antes de ser Impresiónate Rotulación, era una firma dedicada a la fotografía analógica, con laboratorios y varias tiendas en las ciudades de Cádiz y Sevilla. Decidió evolucionar de la mano de los nuevos tiempos y aprovechar las ventajas de la tecnología.
