Carlos Molina Castillo ofrece tanto a nivel personal como profesional tratamientos de quiromasaje, osteopatía y medicina tradicional china. Su motivación para este trabajo viene del profundo estudio de la fisiología muscular y articular llevado a cabo durante su larga trayectoria como entrenador. Esta labor le fue acercando al análisis y el tratamiento de las lesiones y a la búsqueda del bienestar corporal y emocional.
Desde hace quince años, Carlos Molina Castillo trabaja en solitario en su propia consulta de osteopatía en Sevilla. Su despacho está instalado en su propio domicilio, pero Carlos también puede desplazarse a casa del cliente si este así lo desea. A lo largo de estos tres lustros de experiencia, Carlos ha atendido a casi 1000 personas, lo que indica la alta aceptación que su labor ha alcanzado.
La mayor parte de los tratamientos que Carlos lleva a cabo se inscriben en el campo de las dolencias, las limitaciones y las tensiones musculares y articulares, así como los problemas emocionales relacionados con el estrés. Igualmente, Carlos también realiza tratamientos de manipulación visceral.
El buen entrenador debe transmitir a sus deportistas el conocimiento y el control de los parámetros que harán mejorar su rendimiento tanto físico, como psicológico y emocional.
En el tratamiento de tensiones, limitaciones y bloqueos músculo-articulares aplico la misma filosofía: tras analizar el problema y aplicar el tratamiento, trato de informar al paciente para que revierta los procesos que provocaron la lesión, mediante el control de su propio cuerpo y mente.
Me siento cómodo con la camilla de madera que utilizo. Es amplia y cómoda para el cliente, lo que considero muy importante. No obstante, me adapto muy bien a otros tipos de camillas.
Una vez escuchado y anotado el relato del cliente sobre sus problemas y efectuadas las exploraciones y pruebas oportunas, el quiromasaje, además de ser directamente beneficioso para el cliente, me proporciona una valiosa información sobre el estado de los tejidos blandos (músculos, tendones, ligamentos, fascias, nervios, vasos, etc.) y de las restricciones articulares.
Las restricciones de movilidad y motilidad visceral acarrean problemas en el funcionamiento de las propias vísceras, así como molestias reflejas en el sistema muscular y articular. Las apasionantes técnicas de osteopatía visceral contribuyen al bienestar general hasta extremos desconocidos por la mayoría de las personas.
Carlos Molina Castillo utiliza la osteopatía junto con otras terapias para ofrecer a sus clientes una diversa y amplia panoplia de tratamientos para mejorar la salud. Esta diversidad le permite abordar mediante la escucha activa inicial el problema del paciente. Una vez determinada la causa del mismo, la osteopatía le permite aplicar un tratamiento que no solo combata los síntomas sino la raíz y las causas de la patología. Asimismo, Carlos ofrece consejos y sugerencias a sus clientes para que eviten reincidir en lesiones y patologías mejorando sus hábitos posturales, de movimiento o cualesquiera otros que conlleven perjuicio para el organismo.