Marta Bethencourt (natural de Barcelona) y Thalia Pérez (natural de Ciudad de México) son las fundadoras del Centro de Psicología Thamar, fundado hace más de seis años y donde atienden como especialistas en distintas áreas, entre ellas, Terapia de Pareja y Sexología Clínica. Marta y Thalia se conocieron en el Máster de Sexología Clínica y, unidas por su pasión por este trabajo, decidieron emprender juntas este proyecto tan gratificante, con el objetivo de proporcionar atención psicológica a niños y adultos.
Empezaron trabajando en Madrid, pero, por circunstancias de la vida Marta se trasladó a Dublín, donde reside actualmente. Al ser ambas inmigrantes, decidieron estudiar los efectos que tiene la migración a nivel psicológico, relacional y emocional. Forman un equipo especializado en distintas áreas, como son la pareja, la sexualidad, la infancia y la adolescencia. Actualmente cuentan con un equipo de seis profesionales, todos amantes de su vocación.
En el centro atienden muchos tipos de dificultades que se presentan en la vida cotidiana, como pueden ser: ansiedad, depresión, TDHA, autoestima, dificultad en la toma de decisiones, comunicación en pareja, dificultades sexuales y un gran etc. Buscan herramientas para dar una atención especializada e individual en cada una de las áreas. Sus pacientes buscan confianza, comprensión y lograr sus objetivos terapéuticos.
Es por ello que los profesionales de Psicología Thamar se vuelcan en cada persona, ofreciendo un espacio de confianza, respeto y mucho trabajo. Su orientación es la corriente Cognitivo Conductual, en la cual las personas tienen un papel activo, eliminando el estereotipo del Psicólogo que escucha, mientras el paciente habla.
Los motivos por los que Thalia y Marta escogieron este trabajo son muy simples: se han dado cuenta de que la salud mental es tan importante como la salud física. Sin embargo, indican que aún en estos tiempos, la salud mental no está considerada a ese nivel de relevancia, ocasionando a muchas personas vergüenza o reparo al pedir ayuda psicológica. Afirman que nuestra mente es el motor de cada día y debemos cuidarlo, alimentarlo, sanarlo y ejercitarlo.
Explican que ambas se llenan de satisfacción cuando ven a sus pacientes alcanzar sus objetivos creando una vida mental saludable, lo cual influye de manera positiva en otras áreas como son la emocional, la familia, los amigos, el trabajo, la pareja, los hobbies, el espacio personal, etc. En su profesión aprenden todos los días con sus pacientes.
La terapia de pareja tiene una duración de 90 minutos y un coste de 90 euros. Comenzaremos este tipo de terapia con 3 o 4 sesiones para realizar la evaluación, en la que obtendremos, mediante entrevistas u otros ejercicios, toda la información posible acerca de la relación.
Así podremos pasar a la intervención, la cual será finalizada según alcancemos los objetivos terapéuticos que la pareja haya determinado. Estos objetivos se alcanzarán con diversas tareas y herramientas que proporcione el profesional.
Algunas de las principales preocupaciones que tienen las parejas es la falta de comunicación, o bien la mala comunicación, generando dificultades en la toma de decisiones, la comprensión de los sentimientos tanto propios como del otro miembro de la pareja, requerimientos, etc.
También podemos ver de manera continua dificultades para disfrutar o mantener relaciones sexuales, generando patrones o rutinas que les generan insatisfacción o rechazo. Y otras situaciones que les generan malestar como la infertilidad, la infidelidad, la desconexión de objetivos vitales, etc.
Cuando una pareja lleva un tiempo conviviendo, sus miembros generan patrones de comunicación difíciles de identificar y cambiar. Estos patrones se convierten en una rutina y pueden generar un bloqueo en el comportamiento y en las emociones de los dos miembros de la pareja.
Con la terapia de pareja ayudamos a las personas, primero a identificar esos patrones y, segundo, les facilitamos herramientas necesarias para modificarlos, promoviendo una comunicación de escucha activa y asertiva.
El momento indicado para acudir a terapia de pareja es cuando las parejas comienzan a detectar la existencia de un malestar individual o de malestar que se produce al estar juntos, cuando vemos que nos es imposible tomar decisiones, cuando nos sentimos distanciados o incómodos.
Sin embargo, la mayoría de parejas esperan hasta el momento más crítico, cuando la terapia se convierte en un ultimátum y la forma de relacionarse es una fortaleza difícil de modificar. Esto no quiere decir que sea imposible. Si ambos están dispuestos y tienen como objetivo mejorar la relación, probablemente lo logren. La terapia de pareja tiene un 70% de éxito. También debemos decir que, muchas veces, el éxito de la terapia es saber llegar a acuerdos amistosos para una separación menos dolorosa y traumática. Hay parejas en las que la separación no es un fracaso, sino un triunfo.