Miguel Ángel Castaño, de 51 años, es natural de Jerez y su empresa se dedica a la fotografía desde hace 21 años con una actividad enfocada a varios sectores de la imagen, los eventos y las empresas. Asimismo, Miguel Ángel trabaja para el sector editorial, el de la moda, la fotografía escolar, el diseño y en los últimos años dentro de la actividad dedicada a redes sociales. Siempre ha intentado mantener ese abanico de servicios pensando que si en determinadas épocas algunos de los sectores se vienen abajo, podrá seguir con los demás. Aunque está sólo en la empresa, para cada trabajo cuenta con un equipo de colaboradores para resolver las necesidades que se presentan, asistentes, otros fotógrafos, videógrafos e iluminadores.
Nos explica Miguel Ángel que desde que se ha generalizado el mundo digital, los fotógrafos se han encontrado con un escenario mucho más cambiante. Con mucha más frecuencia aparecen herramientas nuevas, la creatividad se ha desbordado y se ha abierto una puerta con la que se ha puesto al alcance de más personas la fotografía y el vídeo. Miguel Ángel apuesta por mantener diversos ámbitos de trabajo, ya que considera que es la mejor manera de mantener en el tiempo este negocio. Aún así, la gastronomía, los eventos sociales y religiosos y el marketing electrónico son las áreas en las que más me apoya actualmente. En su caso, escogió este empleo por vocación, ya que es algo que ha querido desde pequeño. Como sus grandes motivaciones para seguir aprendiendo, mejorando y dando lo mejor de sí mismo día a día están el cumplimiento de su trabajo por un simple ejercicio de responsabilidad, además de que, muchas veces, en largas sesiones de fotografías o de edición, lo que le hace “tirar para adelante” es el amor por esta profesión.
¿Qué problemas puedo evitar al contratar vuestros servicios de fotógrafo de bodas? ¿Tenéis referencia de otros trabajos como fotógrafo de bodas?
Uno de los grandes valores añadidos al contratar a un profesional es, sin duda, la experiencia con la que este cuenta a la hora de resolver inconvenientes. Cuando todo funciona bien es más fácil afrontar el trabajo, pero cuando aparecen inconvenientes es cuando la experiencia ayuda a resolverlos y, por lo tanto, es una garantía.
Aunque cada uno tenga su propio estilo, lo que hacen los demás siempre enriquece, ayuda a que el estilo y el gusto por un tipo de fotografía se mantenga vivo y creo que es bueno ver lo que hacen los demás, que no copiarlo.
¿Además de bodas qué otro tipo de servicios ofrecéis como fotógrafo profesional?
A día de hoy ofrezco servicios como fotógrafo en una amplia gama de campos, como el marketing digital y la gastronomía, además de fotografía de moda. Apostar por varios ámbitos profesionales facilita mantener una carga aceptable de trabajo cuando algún campo se ve afectado, como, por ejemplo, ha sucedido con la celebración de miles de bodas canceladas por la pandemia.