Encuentra Desarrolladores Web en Móstoles

Los mejores 78 desarrolladores de páginas web en Móstoles

Enrique Orihuela es un madrileño de 39 años que gracias al teletrabajo está valorando mudarse a Canarias en los próximos meses y trabajar desde allí con clientes de toda España. Hace 5 años abrió una agencia en Madrid (Soluciones Fórmula Diferente S.L.) de diseño web y marketing digital con 2 socios más. Tenían en plantilla a 7 personas y Enrique estuvo como jefe de producción y de equipo. Gracias a la experiencia, aprendió a manejar muy bien cualquier tipo de proyecto digital, tanto a nivel técnico, como a nivel de equipo y clientes. Después de 2 años, por diversos motivos y hablando con sus socios, acordaron seguir cada uno por su lado, por lo que Enrique comenzó su proyecto en solitario con Kiweb. Actualmente uno de sus ex-socio colabora en algunos trabajos y se ayudan mutuamente,. Asimismo, Enrique también colabora con diseñadores gráficos profesionales y agencias de social media para las redes sociales. Enrique es experto en diseñar páginas web con Wordpress y tiendas online con Woocommerce y Prestashop. Conoce muy bien el sistema de archivos y programación de ambos CMS y por ello suele hacer lo que necesite el cliente, puesto que no se limita a los diseños de las plantillas. Explica Enrique, que lo bueno de saber programación, es que puede modificar el código de las plantillas o de la base del CMS y lograr hacer lo que se necesite, con la satisfacción que ello tiene. Estos sistemas funcionan a través de PHP, pero también hace programas a medida en JAVA (ha elaborado programas de gestión para tiendas de informática, para empresas de logística o incluso tpv´s para ferreterías). Además de todo esto, maneja muy bien las bases de datos MySql y Maria DB y lenguajes como Javascript, HTML y CSS. A Enrique siempre le ha llamado mucho la atención todo lo que tiene que ver con la informática y con las páginas web, etc. Cuando estaba estudiando, al principio del todo, no estaba muy seguro en qué mundo estaba entrando, pero pocos meses después, se dio cuenta que le gustaba esto, y además se le daba bien. Relata que los primeros meses y el primer año de experiencia fueron duros, pero cuando tuvo claros los conceptos básicos y una mínima experiencia, el trabajo se convirtió en pasión, sobre todo al darse cuenta de que los clientes están muy contentos con los resultados de los proyectos.