A Luisa Hafner, malagueña de 63 años, le han gustado las flores desde niña, ya que su familia tenía un jardín donde se cultivaban flores para cortar y adornar la casa y siempre ayudaba a colocarlas en los jarrones. También en el colegio ayudaba a la monja encargada de poner las flores en la iglesia. Durante años, trabajó en la empresa de importación de su padre, no relacionada con las flores. Al quedarse viuda, en el año 1989 y con 32 años, necesitaba un cambio y unos amigos que tenían una casita con jardín vacía, y que conocían su afición a las flores y las plantas, se la prestaron para empezar su negocio. La calle donde estaba la casita se llama Molino Hundido y sus hijos mayores (de 13 y 11 años) bromeaban diciendo “¡negocio hundido!”. Pero tuvo suerte de tener una familia muy grande y, según se iban casando sus primas, le pedían flores para sus bodas. En aquella época estaban de moda las flores secas y Luisa tuvo mucho éxito haciendo ramos y centros para hoteles, tiendas, etc.
En 1994 montó su primera tienda al público y en 1996 se instaló en el Hotel Puente Romano. Durante años ha suministrado a los mejores hoteles de la costa, Marbella Club, Villa Padierna, Puente Romano, Gran Hotel Miramar, etc. En estos años ha ido evolucionando gracias a sus viajes y a su asistencia a ferias internacionales y por suerte ahora cuenta con la colaboración de su hija, quien le hace estar al día. Están especializados en bodas y eventos de todo tipo y en el envío de flores a domicilio. A Luisa le gusta mucho cuando les encargan toda la decoración de un evento, no sólo las flores.
Considera que gran parte del éxito de su empresa se encuentra en empatizar con los clientes, escucharlos y darles lo que ellos quieren. Son muchas las razones que empujan a Luisa a seguir disfrutando su trabajo día a día. La primera, la necesidad de trabajar; la segunda, la responsabilidad de mantener los puestos de trabajo y, por último, la ilusión que le produce recibir las flores cada día aunque a veces haya algunas desilusiones porque llegan en mal estado.
¿Para qué tipo de celebraciones recomendais un envio de flores?¿Por qué?
Nosotros pensamos que, en realidad, ¡cualquier motivo es bueno siempre para recibir flores!
No obstante, y como es lógico, lo más habitual es que nos encarguen flores para eventos sociales y familiares y momentos importantes vinculados a agradecimientos, nacimientos, cumpleaños, etc.