Juanma Campillo es un sevillano de 49 años que regenta la empresa DRACO FIGHT CLUB, una Academia enfocada en la enseñanza y difusión de las artes marciales y los deportes de contacto, además de algunas actividades de acondicionamiento físico. Juanma trabaja en solitario como autónomo.
La empresa física se creó en plena crisis económica, en el año 2011, y pasaron por años muy duros hasta el 2016. Fue a partir del 2017 cuando empezó a crecer el número de alumnos, y han tenido una evolución en positivo, hasta el pasado mes de marzo, cuando apareció la pandemia de la covid-19. Están especializados en las Artes Marciales y Deportes de Contacto (KICKBOXING, BOXEO, JIU-JITSU y KRAV MAGA). A Juanma le gustaría seguir creciendo en la línea de formación y enseñanza, así como facilitar el crecimiento en general de sus alumnos. Afirma que los alumnos piden cosas muy diversas y que en la academia les ofrecen de todo y para todos los gustos (graduaciones, competición, etc.).
Juanma abrió su propia empresa cuando la empresa donde trabajaba anteriormente como responsable del área TIC quebró durante la crisis de 2008. Su trabajo le apasiona y esta pasión es motivo más que suficiente para levantarse con ganas e ir a trabajar.