Alejandra, residenciada en Madrid, es una madrileña de 33 años, apasionada por el trabajo cerámico que realiza con sus manos. A los 8 años sus padres le apuntaron a un taller de cerámica al lado de su casa. Alejandra considera que eso fue una señal del destino, porque desde que empezó a jugar y trabajar con los materiales de esta disciplina artística, pasaba la semana pensando con ilusión en el día de volver a su clase. Para ella este era “el día de cerámica”.
Desde hace dos años tiene su taller en el barrio de la Concepción, en Madrid, aunque empezó en otro local hace casi cuatro años. Ella imparte clases de cerámica a niños y adultos. Asimismo, da asesoramiento a artistas, estudiantes, decoradores y arquitectos.
Su local también se presta para la celebración de cumpleaños, reuniones, aniversarios, entre otros tipos de eventos. Recibe encargos para regalos de boda, comunión y realiza objetos personalizados. ¡Cualquier idea que a alguien se le ocurra en cerámica, puede hacerse en su taller! Alejandra está especializada en las distintas técnicas, incluida el trabjo en el torno. También es experta en reproducción con moldes. Trabaja con distintas arcillas, desde la típica arcilla roja a la porcelana. Domina varias técnicas de decoración y emplea algunas cocciones especiales como el rakú.
Como podemos apreciar Alejandra es una ceramista versátil que pone amor a lo que hace, para complacer a su clientela. No escatima esfuerzos en dar lo mejor de su creatividad y destrezas para lograr piezas de alta calidad.
La idea es transmitir la pasión por este material. Y no sólo por el material, que es fascinante, completo y mágico a la vez! El objetivo es que la gente se interese por explorar sus habilidades y destrezas, manipulándolo y observando todo lo que se puede lograr. El placer de trabajar con las manos, de empezar a modelar una masa informe y convertir eso en tu taza de desayuno de todos los días… El café te sabe mejor!
Es fundamental tener arcilla y horno cerámico, bien sea eléctrico, de gas, de leña… Todo lo demás es prescindible.
Esto sería lo esencial, aunque en el taller disponemos de un montón de herramientas y materiales para acabar las piezas. Tornetas para poder trabajar y girar nuestra pieza, moldes para reproducir distintas formas, todo tipo de envases para mezclar y, por supuesto, materias primas como óxidos colorantes, feldespatos, cuarzo… para decorar las piezas y realizar los esmaltes.
¿Qué tipos de arcillas hay? ¿De qué se componen los diferentes tipos de arcillas?
Dependiendo de su composición, diferenciamos entre pastas de baja y alta temperatura. Las de baja temperatura son la loza y la típica arcilla roja (como la de los ladrillos). Las de alta temperatura son arcillas refractarias, gres y porcelanas. Hay arcillas blancas, negras y actualmente se consiguen casi de cualquier color.
La composición de cada una de ellas, varía otorgándole distintas propiedades. Sílice, feldespatos, caolín… ¡Pura química!. De hecho, como curiosidad, la arcilla solo se convierte en cerámica cuando ésta se cuece por encima de los 800°C.
Trabajar con arcilla es maravilloso, pero no podemos decir que sea fácil, pues es un material exigente, que requiere de mucha observación, precisión, paciencia y pulcritud. La técnica de construcción que usemos va a depender de la pieza que queramos realizar. Cada pieza es única, como la persona que la realiza, por ello usamos las técnicas que más se adapten a cada uno. Hay procedimientos estándares pero cada trabajo cerámico es muy individual.
Las técnicas que enseñamos para construir son la de pellizco, churros, planchas y trabajos en macizo para luego vaciarlos. También existen distintas técnicas de decoración, esgrafiado con engobes, cuerda seca, bajo y sobre cubierta, tercer fuego, y además nos encanta experimentar, si puede entrar en el horno, allá que va! Para cada participante estar en el taller se convierte en un relax total.
La cerámica nos posibilita disfrutar de un acto creativo en el que, con pericia, esfuerzo y siguiendo las técnicas adecuadas, podemos crear objetos de gran belleza por nosotros mismos. En el taller de cerámica de Jandra Cerámica, su fundadora, la ceramista Alejandra, nos ofrece una variedad de técnicas, fórmulas y consejos para hacer de nuestras manos las mejores herramientas para la creación que nos llevan a materializar lo que está en nuestra imaginación. Y además nos ofrece un descanso de nuestro smartphone!