Un logotipo en un peine la llevó a desarrollar su profesión, el diseño gráfico está muy unido a la creatividad y la fotografía también necesita de esta para ser original y diferente. Hoy vamos a hablar con Merche Valdés, 52 años y residente en Dénia. Es diseñadora gráfica desde hace más de 30 años y actualmente fotógrafa también.
Entró a trabajar a una imprenta con 18 años porque el dueño se fijó en sus dibujos. Posteriormente trabajó en otra imprenta más grande, donde llegó el primer ordenador “Apple» y los dueños decidieron que aprendiera cómo utilizarlo. Por aquel entonces no había internet, ni tutoriales, y los libros sobre el paquete adobe eran carísimos, así que errando aprendió.
Por otro lado siempre fue aficionada a la fotografía, y en 2008 cuando llegó la crisis, se involucró más en ella, ya que le apasionaba. Nos comenta que su empresa es “buenrollera», es decir que se respira buen rollo por todos lados. Trabajó para otras empresas y lo que tenía claro a la hora de montar la suya es que en ella iba a vibrar la energía positiva. Es un espacio de fotografía y diseño gráfico. En estos momentos funciona al 50% en las 2 disciplinas, y está encantada.
Actualmente trabaja sola, pero no descarta en un futuro si crece, contratar a otros profesionales. La empresa es aún joven, lleva año y medio abierta, pero ofrece muchas posibilidades, desde tarjetas, marca de empresa o el reportaje de fotos familiar en Alicante.
Lo vivo con pasión, el día anterior estoy intranquila, quiero que salga todo perfecto. Siempre quiero ver antes el lugar, la luz, el sol, la sombra, y si es en el estudio, yo opto por buscar una temática acorde a la persona que desea ser fotografiada.Estoy dispuesta siempre a hacer fotos, aunque a veces me pone nerviosa cuando algún niño no quiere hacerse fotos, pero buscamos una alternativa para que cambie de opinión.
Mi cámara es siempre la misma, me encanta, pero sí que es cierto que para el estudio suelo usar una óptica fija de 50mm y si es en exteriores llevo un tele de 18-135 mm.
Primero concertamos una cita para conocernos y saber los gustos de los protagonistas, qué ideas llevan, y si no tienen nada planeado les propongo alguna opción.Decidimos interior o exterior, ropas y cambios de vestuario.
Que tengan empatía y paciencia. Cuando conectas con los modelos, todo va como la seda pero si estás frío y distante, ellos no se abren, y por ende están menos dispuestos a hacer lo que les pides, no se sueltan y quedan muy artificiales.
Hay veces que nos sentimos atraídos por dos cosas,no somos capaces de elegir, o quizás es que no queremos hacerlo. Si se pueden compaginar ambas y además tienen que ver una con la otra, es perfecto. El diseño gráfico es creatividad, imaginación, originalidad y la fotografía tiene mucho de esto. La persona que lleva a cabo ambas profesiones, como Merche, se considera una artista por los cuatro costados y más aún cuando le es imposible separarse de sus dos pasiones, ambas con las que puede desarrollar el instinto artístico que lleva dentro. Nos gusta conocer gente así.