Vanessa Merlo, maquilladora profesional en Asturias, se dedica al mundo del maquillaje profesional desde hace 8 años, pero lleva vinculada al mundo de la imagen desde que nació, ya que proviene de familia de fotógrafos, por parte materna y paterna,(lo eran hasta sus abuelos) y continúan nuevas generaciones de su familia dedicándose a ello. Su madre, que también era peluquera, maquillaba y peinaba a novias antes de hacerles las fotos, y desde niña, Vanessa la acompañaba a trabajar, por lo que siempre ha sentido que tenía su mismo instinto por la estética y el querer sacar el máximo potencial a cada persona. Explica Vanessa que eso es algo que no te enseñan en formación, y aún así, tampoco para de formarse constantemente.
En sus 8 años de profesión Vanessa no ha parado de crecer como profesional, formándose de manera presencial u on line, trabajando cada vez con mejores productos y llegando cada vez a más personas dentro y fuera de Asturias. Por el momento trabaja sola y es autónoma. En alguna ocasión ha trabajado con alguna compañera, pero prefiere continuar sola, porque considera que las clientes valoran su trabajo y su gusto personal, que es lo que diferencia a unas profesionales de otras.
Su área de especialización es el maquillaje social en toda su amplitud. Disfruta maquillando a “sus princesas” en su gran día, y ayudándolas en todo lo posible, con todo lo que necesiten y realizarles el maquillaje de sus sueños, resultado que hasta ahora siempre ha conseguido, pues no para hasta que lo logra. Por otro lado, siente pasión por la piel madura, le encanta maquillar ese tipo de pieles, siempre intenta conseguir resultados naturales que resten edad, den luz a la piel y se vean radiantes.
Los maquillajes para eventos es otro terreno que disfruta, pues le permiten expresar su creatividad: las clientes le dicen cómo les gustaría verse, cómo es su look y todo va fluyendo hasta conseguir ese maquillaje que las favorezca, les aguante durante horas y se vea perfecto en fotografía. Actualmente, Vanessa también se está enfocando en la formación a modo de automaquillaje, ya que le gusta la cercanía que tiene con las alumnas y poder ayudarlas de un modo muy personal y específico a sacarse partido.
Desde muy pequeña lo he vivido muy de cerca. Siempre me ha encantado el maquillaje, y era en lo que me fijaba en todas las fotografías de mis familiares y por supuesto de las revistas de moda y televisión. Comencé a formarme como profesional, vi que disfrutaba con cada cosa que aprendía y mi cabeza cuando maquillaba realmente se evadía de todo, se relajaba y tenía ese don para sacar partido a las personas.
Una vez hechas muchas formaciones como profesional, y después de maquillar a todo mi entorno de familiares y amistades para todos los eventos, me decidí a emprender vuelo en este mundo. La forma de conectar, según mi punto de vista, la baso en saber escuchar, tener empatía con cada clienta, transmitir seguridad y tranquilidad.
El secreto de un maquillaje radiante es trabajar ante todo una bonita piel, dejar un aspecto natural, con mucha luminosidad, aplicando los productos adecuados a cada persona.
En concreto no trabajo con una marca específica de productos. Lo que sí les exijo a todas ellas, es que no estén testadas en animales, y si pueden ser veganos, mejor que mejor. Trabajo con marcas como Charlotte Tilbury, Anastasia Beverly hills, Hourglass, Becca, Urban Decay… etc.
Los utensilios, también dependen del resultado que busquemos… pero las bases, me encanta aplicarlas con Beauty Blender, un esponjita, con forma de huevo, libre de látex, que se trabaja cuando está húmeda y puedes lavarla tras cada uso, cosa que aunque tengo muchas, para no tener que hacerlo después de cada maquillaje, garantiza una higiene y un acabado precioso usándola con la técnica correcta.
Pues ha significado el sentirme como me siento: muy querida y valorada por mis clientas.
Yo recomendaría sobre todo, que sintiera lo que hace; que se asegure de que cuando maquilla su cabeza, no es capaz de pensar en nada más, pues por mucha formación que realices, si no sientes lo que haces, no lo disfrutarás ni darás lo mejor de ti.
Pueden contactar conmigo a través del correo de mi página web, contacto@vanessamerlo.es. A través de las redes sociales por privado como Facebook o Instagram, donde me encuentran como vanessa merlo makeup, o directamente en mi número de teléfono.
Por supuesto, en el caso de las novias, me desplazo al lugar donde ella se prepare, sea su casa, un hotel, o donde sea. Para shootings también. Y en el caso de maquillaje social, si son varias las personas que se contratan para maquillar, también me desplazo. En el caso de maquillaje individual, deben venir a mi tocador.
El tiempo es muy relativo, pues se va llenando la agenda desde el año anterior o incluso dos años antes, en el caso de las novias, pero puedo decir que de 9 a 3 meses antes se suelen cerrar las bodas. En cuanto al maquillaje social, tengo clientas que en cuanto saben que tendrán una boda, me avisan ¡aunque sea un año antes! Las anoto, pero deben saber que hasta un mes antes podríamos mover el horario, dependiendo del trabajo.
Vanessa Merlo conoce todos los secretos para que el maquillaje que realiza cause impresión en todos, empezando por la propia cliente. Ya sea para una boda, una reunión familiar, celebraciones sociales o cualquier otro tipo de eventos, Vanessa tiene los conocimientos, los recursos y la pasión para que sus clientes dejen huella en la retina de todos los asistentes recalcando sus virtudes estéticas y combinándolas para que resalten mejor el look escogido por cada cliente.